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La terrible respuesta de Rufián cuando le preguntan por la violencia
El diputado de ERC, Gabriel Rufián, no ha sido capaz de condenar la violencia que se vivió en las calles de Barcelona durante la Diada, se une así a Pedro Sánchez que tampoco lo ha hecho.
El portavoz de Esquerra Republicana en el Congreso, Gabriel Rufián, sigue sin condenar los ataques que sufrió la Policía durante la manifestación independentista de la Diada. El diputado ha preferido dar una respuesta banal, que infravalora los disturbios. El portavoz republicano se suma, de esta manera, al presidente Sánchez y prefiere no mostrar su rechazo a lo ocurrido en Barcelona.
"No participamos de burbujas mediáticas", ha sido la respuesta que ha dado Rufián cuando un le han preguntado sobre si ERC condena el ataque a la Jefatura de Policía Nacional en Barcelona. Ante tan atónita respuesta, le han repetido la respuesta con igual resultado.
Los hechos se remontan al pasado sábado, cuando el independentismo festejaba su día grande, la Diada ya no es una fiesta para los catalanes, desde hace años se ha convertido en una oda al independentismo. Y en muchas ocasiones como esta al independentismo más radical.
Barcelona volvió a vivir un día de extrema violencia, la marcha convocada por la izquierda independentista transcurría sin incidentes hasta que un grupo se ha concentrado ante la Jefatura de Policía de Barcelona desde donde han lanzado botellas y han quemado mobiliario urbano.
Unos 1.000 manifestantes lanzaron latas, algunas botellas, petardos y papeles. Han quemado algún objeto de mobiliario urbano mientras proferían gritos, mientras los agentes antidisturbios aguardan detrás de las vallas reforzadas que ya había instaladas, y que también han sido derribadas en parte.
Los momentos que vivieron los policías a las puertas de la Jefatura de Policía de Barcelona fueron de alta tensión. Pero al parecer no fueron suficiente para Gabriel Rufián, ya que no considera necesario condenar la violencia que se extendió por las calles de Barcelona y causaron el terror de muchos barceloneses.
