Los de Feijóo celebran el "nerviosismo" de Sánchez ante el órdago de Junts a los tres decretos que el Ejecutivo pretende aprobar este miércoles. Hasta tres veces llamó el Gobierno al PP.
Los de Puigdemont exigen a Pedro Sánchez, ni más ni menos, que retire los tres decretos que el Gobierno pretende aprobar este miércoles para "negociarlos" y rehacerlos "uno a uno" si quieren conseguir sus imprescindibles sietes votos. Eso o un rotundo "no", amenaza Junts a menos de 48 horas de la votación.
El PSC, por su parte, reclama "responsabilidad" a Junts y exponen como justificación a su petición los resultados de las generales en Cataluña y avisan de que votar en contra "pone en peligro medidas para los más vulnerables". Nada parece, sin embargo, ablandar a los brazos ejecutores de Puigdemont que lanzan un órdago sin paliativos al PSOE: la posibilidad de que, una vez más, el Gobierno ceda en unas u otras exigencias y Junts acabe por apoyar -in extremis- los intereses políticos de Pedro Sánchez no está descartada. Pero lo que está claro es que, como un déjà vu, le harán sudar la gota gorda a los moradores de La Moncloa.
"Y así será durante toda la legislatura o lo que logre aguantar Sánchez", advierten fuentes de Génova consultadas por este periódico. Unos populares que, dejando claro su "no" a no ser que Sánchez acceda a las tres exigencias propuestas, disfrutan de un dramático momento para el PSOE en el que la continuidad del Gobierno -ocurra lo que ocurra- ya se ha evidenciado del todo frágil. Y ahora no hay pero justificativo que valga: estamos ante el Gobierno más inestable de toda la historia democrática de España y así se ha ratificado esta semana.
"Creo que el PP no debería ayudar en nada al Gobierno, en nada. Que se busque el Gobierno los problemas que él mismo ha provocado, que se busquen las soluciones él solito, que es donde él se ha metido", así avaló este lunes Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, el "no" del PP a los tres decretos del Gobierno.
Isabel Díaz Ayuso, responde al PSOE y a Pedro Sánchez: «¡Que se busquen la vida! Yo no les daba ni agua. No estamos aquí para salvarles la cara. El Partido Popular no debería ayudar en nada al Gobierno. Cada vez que le hemos tendido la mano, nos han escupido a la cara». pic.twitter.com/OFF7qN9gBj
— Jesús Álvarez (@jesusalvarezg) January 8, 2024
Siendo desde Génova un tanto más flexibles, han otorgado una posibilidad al Gobierno que, según confirman fuentes del PP, no han sabido aprovechar. Tres exigencias reclaman los populares para negociar una abstención que pueden salvar los decretazos del Ejecutivo: rebajar el IRPF a las personas con ingresos inferiores a 40.000 euros; bajar el IVA a la carne, el pescado y las conservas; y reconsiderar la subida del IVA a la luz y el gas, especialmente a las rentas más bajas.
Borja Sémper (PP): "El Gobierno tiene un problema estructural, de incapacidad de gobernar, de incapacidad de poner de acuerdo intereses contrapuestos"#Canal24Horashttps://t.co/rscwNdtsL3 pic.twitter.com/xYWtf6elBC
— RTVE Noticias (@rtvenoticias) January 8, 2024
Además, recuerda a ESdiario una fuente muy próxima a Feijóo que "el PP solicitó hace dos semanas un encuentro con las vicepresidentas primera y tercera que tanto María Jesús Montero como Teresa Ribera rechazaron de manera descortés". "Ahora parece que las urgencias del Gobierno producen un repentino interés en la postura del Partido Popular", se regocijan los populares.
Tal y como avanzamos en este periódico, y así confirman fuentes de la dirección del PP, "el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, telefoneó en la tarde de ayer [domingo] a la secretaria general del PP, Cuca Gamarra. Han vuelto a dialogar hoy mismo. Además, la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha llamado al portavoz y vicesecretario de Cultura, Borja Sémper", desvelan.
El "rogar" ayuda al PP lo que demuestra es una palmaria "preocupación", celebran desde Génova, al tiempo que garantizan que "el principal partido de España no socorrerá a Pedro Sánchez en caso de que sus socios le fallen pasado mañana".
"No hay predisposición", aseguran desde el PP, porque "llamaron para pedir pero no para ofrecer", destacan. No solo eso. Los de Feijóo critican duramente que el Gobierno hubiera sacado adelante estos cambios legislativo por decreto: "Que los hubieran presentado como proyecto o proposición de Ley para que se pudieran debatir en el Congreso y presentar enmiendas, vamos, lo ordinario y lo lógico", aseveran los populares consultados, hartos de la forma de gobernar "a base de decreto" de Pedro Sánchez.
¿Qué ocurrirá, finalmente, en este decisivo miércoles para el Gobierno? Esa es la pregunta del millón.