Ábalos se venga: Pedro lo sabía todo

Cerdán ya está entre rejas. Todos los socialistas lloran aunque dicen sentirse desengañados. Pero lo que empieza a achicharrar no es esa celda: es la confesión de Ábalos.

El exministro se ha cansado de tragar. Ahora cuenta (en pequeñas dosis) que Sánchez lo sabía desde septiembre de 2023. Cinco meses antes de que fuese detenido Koldo García. Mucho antes de que fingieran sorpresa. Demasiado tiempo mintiendo a propios y ajenos.

Pedro le mandó un coche oficial. Lo metió en Moncloa. Tres horas de charla. En el despacho del presidente y por los jardines del palacio. Y a seguir como si nada. El manual de la Moncloa bunkerizada: primero negar, luego culpar, después sacrificar peones. Todo menos dar explicaciones salvo para hacer ristras de sentimentalismo.

Ahora Vox se querella. Feijóo agita la moción de censura y no le salen los números. Sumar juega a hacerse la digna, pero sin bajarse del autobús sanchista. Y Sánchez ensaya poner cara de mártir. El sanchismo no se hunde de golpe: se desangra por capítulos. De Koldo a Ábalos. De Ábalos a Cerdán. Del coche oficial a Soto del Real. De Ferraz a la nada.

El PSOE sigue diciendo: no pasa nada. Pero todo pasa. Koldo, Ábalos , Cerdán, Begoña, hermanísimo, fiscal general. Y todo acaba pasando factura. 

A. M. BEAUMONT