| 28 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Carlos Sobera recibe a Adela en el restaurante de Cuatro y esta se pone a llorar.
Carlos Sobera recibe a Adela en el restaurante de Cuatro y esta se pone a llorar.

La extraña reacción de una soltera de 'First Dates' al ver a Carlos Sobera

Adela acudió al restaurante del amor de Cuatro para encontrar a su media naranja y acabó hecha una magdalena nada más entrar por la puerta y ver al presentador del dating show.

| Rocío Díaz Medios

No hay noche que First Dates no reúna a un nutrido grupo de personas ante la televisión para comentar por redes sociales cada uno de los encuentros que se producen en el restaurante del amor, así como los comentarios que puede realizar su presentador, Carlos SoberaY aunque pocos solteros cumplen con el propósito del espacio de Cuatro, y se van sin su media naranja, el formato cumple con su principal objetivo: entretener y divertir. 

 

En su última emisión, la de este miércoles 31 de enero, el dating show de Mediaset abrió las puertas de su restaurante para recibir a nuevos solteros, entre ellos Adela, una gallega sencilla que llegó dispuesta a encontrar una compañera con la que compartir la vida. Pero nadie se esperaba la reacción de esta mujer nada más cruzar la puerta y encontrarse con el presentador: no pudo aguantarse la emoción y empezó a llorar. 

Una soltera de 'First Dates' se pone a llorar

"¿Qué tal estás, Adela? ¿Bien?", preguntó Carlos Sobera segundos antes de que la mujer estallase en lágrimas y se abrazase a su pecho. "Me acuerdo de mi madre (...) No sé, me acuerdo de ella. Lo de estar en Madrid... Es que mi madre murió aquí en Madrid y cada vez que vengo...", comenzó a explicar esta gallega de 59 años, mientras daba a entender que pisar la capital le hacía ponerse sensible. Una situación que no mejoró tras la pregunta del presentador, quien quiso saber si, por lo menos, tenía todavía a su padre con vida: "¿Padre tampoco tienes?". Incapaz de cortar el llanto, Adela respondió que su padre falleció hace muchos años, allá por el año 2010.

Después de prometerle al presentador que cambiaría el chip y que iba a divertirse en la cita, la Adela confesó que es una mujer de relaciones largas y que lleva más de cinco años sin ilusionarse con alguien. Y allí estaba Berta, una mujer de armas tomar que buscaba a alguien "que la domine", para conquistar a la gallega. "Ella tiene el aire de las mujeres que a mí me gustan, pero ella no me gusta físicamente", comentó Berta. Pese a que ambas fueron con intención de encontrar a alguien con quien vivir aventuras, viajar y disfrutar, rápidamente se dieron cuenta de que no eran compatibles. 

 

La gallega estaba muy nerviosa por eso, cuando Berta la invitó a que le contara algo, a ella solo se le ocurrió hablar del documental de Australia que había visto la noche anterior. Y luego trataron el tema del sexo, un asunto que escandalizó a Adela, pero por las declaraciones de su cita, quien aseguró que le gustaba probar y experimentar en la cama: "Tengo 7 o 8 juguetes sexuales (...) Me gusta que me den mis azotes, que me cojan del pelo, que me revuelquen con pasión...".

 

Pero la cita no fluía como debiera. De hecho, en un momento concreto, Berta se atrevió a bromear sobre el peso de Adela. Un comentario muy comentado en redes sociales, por lo fuera de lugar que estuvo. Una ausencia de 'feeling' que se confirmó en la decisión final, donde ambas estuvieron de acuerdo en no tener una segunda cita, porque tienen gustos muy diferentes y no podrían funcionar como algo más que buenas amigas.