| 26 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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La ministra de Economía, Nadia Calviño; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; y la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís.
La ministra de Economía, Nadia Calviño; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; y la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís.

¿Qué tienen en común Calviño, Colau y Villacís?

Las tres han sido protagonistas pero no por buenas noticias, si no por hacer el ridículo. Calviño y su cesta de la compra, Colau con su carta a Netanyahu y Villacís, sin avales en Ciudadanos

| Mr. Meme Opinión

Puede parecer que están en polos opuestos. Sin embargo, la ministra de Economía, Nadia Calviño; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; y la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, tienen cosas en común o, mejor dicho, se han unido esta semana en algo imperdonable en política: hacer el ridículo.

Cada una a su estilo y por diferentes motivos han protagonizado para mal algunos titulares y muchos mensajes en las redes sociales. Sorprende sobre todo lo de Calviño, una mujer preparada y con buena reputación, que sin embargo ha ido degradando su imagen al ritmo de Pedro Sánchez. El presidente es la antítesis del rey Midas, todo lo que toca políticamente se convierte en fango.

Calviño y su cesta de la compra

La ministra ha protagonizado una esperpéntica intervención en la sesión de control al Gobierno en el Congreso. Afirmó, sin ponerse colorada, que ella empieza a notar ya en la cesta de la compra la bajada de la inflación. Y que ella busca las ofertas de supermercado en supermercado. Es difícil discernir si es más falso lo primero que lo segundo. En todo caso resulta hilarante y un tanto ofensivo. No se debe jugar con las cosas de comer, sobre todo cuando está tan caro comer.

Colau escribe a Netanyahu

Lo de Ada Colau no sorprende nada, para qué nos vamos a engañar. La alcaldesa de Barcelona, responsable de un deterioro sin precedentes de la capital catalana, ha sido siempre un esperpento en sí misma. La última ha sido decretar la "suspensión temporal" de relaciones entre Barcelona e Israel. La muy osada ha enviado una carta al primer ministro Netanyahu acusándole de haber establecido un régimen de “apartheid” con los palestinos.

Es fácil imaginar que jefe de Gobierno israelí ni se habrá dignado a contestar aquello de “en estos momentos tengo su carta delante y en breves instantes la tendré detrás”. Es tal la irrelevancia de Colau en la escena internacional que la patochada se comenta sola.

 

 

 

 

Villacís no logra los avales en Ciudadanos

Y Villacís, ¡ay Begoña! En este caso sí que hay que frotarse lo ojos para creer lo que ven. La vicealcaldesa de Madrid no ha logrado ni siquiera los avales suficientes para ser candidata a la alcaldía de la capital. En todo caso, en un gesto de indignidad, la dirección nacional la ha designado a dedo.

¡Qué humillación para Cs y para Villacís! Los únicos que han estado a la altura, negándole los avales han sido los militantes de Ciudadanos en Madrid que no han pasado por el aro de una señora que se quiso ir al PP, que está en Cs porque allí no la quisieron y que aún así pretende representar a la formación naranja.

 Lo cierto es que hemos visto tantas cosas en política en los últimos años que es difícil ya sorprenderse. Todo es esperable, cualquier cosa puede suceder menos, al parecer, que alguien asuma su responsabilidad por algo y dimita. El sillón debe de ser adictivo. Es la única explicación.