
Descubre en qué consiste la técnica CHIVA, uno de los tratamientos más efectivos contra las varices
La técnica CHIVA es un método nacido en los años 80 como alternativa al stripping de venas. ¿Quieres saber más acerca de uno de los tratamientos más efectivos contra las varices?
Es importante conocer por qué salen varices y cómo se pueden prevenir para evitar riesgos importantes para la salud. Los avances en la tecnología permiten la realización de unas microcirugías para varices, que permiten curarlas de forma más rápida y eficaz.
Una operación de varices es tediosa y puede llegar a ser dolorosa, por lo que la técnica CHIVA es una de las mejores opciones que tienes si deseas operarlas correctamente.
La técnica quirúrgica CHIVA (Cirugía Hemodinámica de la Insuficiencia Venosa Ambulatoria) es una técnica conservadora apenas invasiva, que se emplea para tratar la insuficiencia venosa, o varices, presentes en las extremidades inferiores, sin necesidad de extirpar las venas safenas.
Es una técnica que se realiza por indicación médica y tras la realización de un estudio bastante exhaustivo del caso. Algunas de las características que debes valorar sobre la técnica CHIVA son:
Si deseas someterte a este tratamiento, debes saber cómo trata las varices la técnica CHIVA. Generalmente, es de régimen ambulatorio y con anestesia local.
Lo primero es examinar el sistema venoso afectado en las extremidades inferiores mediante una ecografía. Luego, se establecen unas marcas en las piernas para saber por dónde se deben atar las venas.
Se trata de unas zonas en las que se hacen unos pequeños cortes, se extraen las varices, se atan con puntos y se cortan. Muchas de esas incisiones no necesitan puntos, por lo que un apósito de mariposa será suficiente.
Tras la cirugía, tendrás que ponerte una media de compresión en la extremidad que ha sido intervenida y durante un mes, aproximadamente.
Debes saber que la intervención suele hacerse con sedación o anestesia local y dura entre 40 y 60 minutos.
Tras el procedimiento con la técnica CHIVA, los pacientes deben llevar medias de compresión de cuatro a seis semanas. También es necesario establecer unas citas para revisiones después de las seis u ocho semanas tras la operación.
La técnica CHIVA es segura y exitosa, por lo que siempre tendrás los resultados garantizados. Eso sí, debes continuar cuidándote para evitar volver a someterte a una operación ambulatoria de este tipo. Recuerda siempre hacer caso a tu médico y realizar las consultas y revisiones previstas.
Se trata de un método no invasivo, pero aún así, debes saber que pueden aparecer determinados efectos secundarios.
La insuficiencia venosa no se cura con cirugías de varices. Si eres de los pacientes que sufren este tipo de insuficiencias y te sometes a la técnica CHIVA, debes usar prendas de compresión cada día tras la cirugía. De esta forma, prevendrás la aparición de nuevas varices y disfrutarás del éxito de la operación.
El tratamiento se recomienda a pacientes que presentan una serie de complicaciones venosas en las extremidades inferiores. Está recomendado especialmente a personas que:
Por tanto, si entras dentro de una de estas opciones, es recomendable que hables con tu médico/a y que te asesore en cuanto a las posibilidades que tienes de combatir las varices empleando la técnica CHIVA.
La técnica CHIVA es uno de los métodos más importantes a la hora de eliminar las varices en las extremidades inferiores. Cuenta con una serie de ventajas que debes valorar antes de someterte al proceso.
Es importante conocer todos y cada uno de los datos, ventajas y beneficios que puede ofrecer esta técnica CHIVA. Se acabó las largas esperas para las operaciones con preoperatorios y postoperatorios dolorosos.
Esta nueva técnica te permitirá sobrellevar mejor el tratamiento y la prevención de las varices en las piernas.